Cuando pensamos en herencias, normalmente nos vienen a la mente casas, cuentas bancarias o vehículos. Sin embargo, en el derecho sucesorio español, el concepto de herencia es mucho más amplio. Incluye todos los bienes, derechos y obligaciones que el fallecido deja al morir, incluso algunos que pueden sorprender, como su presencia en redes sociales o participaciones en una empresa.
En este artículo repasamos los principales tipos de bienes que entran en una herencia y cómo se gestionan.
1. Bienes inmuebles
Son, con diferencia, los activos más valiosos y frecuentes en una herencia:
- Viviendas (habituales o de inversión).
- Locales comerciales.
- Terrenos y fincas rústicas.
- Garajes y trasteros.
Estos bienes deben inscribirse a nombre de los herederos en el Registro de la Propiedad mediante escritura pública de adjudicación.
2. Bienes muebles de valor
Incluyen todos los objetos físicos que no son inmuebles, pero tienen valor económico:
- Vehículos.
- Obras de arte y antigüedades.
- Joyas y metales preciosos.
- Colecciones valiosas (sellos, monedas, relojes).
Su tasación es fundamental para un reparto justo y para el cálculo del Impuesto de Sucesiones.
3. Dinero y activos financieros
- Cuentas corrientes y de ahorro.
- Depósitos a plazo fijo.
- Acciones y bonos.
- Fondos de inversión.
- Planes de pensiones (con régimen especial de cobro).
Estos activos requieren coordinar con entidades financieras y, en algunos casos, con la Agencia Tributaria.
4. Participaciones sociales y negocios
Si el fallecido era socio de una empresa o autónomo, su participación entra en la herencia:
- Participaciones en sociedades limitadas o anónimas.
- Derechos sobre beneficios futuros.
- Fondos de comercio.
En estos casos, los estatutos de la sociedad pueden establecer condiciones especiales para la transmisión.
5. Propiedad intelectual
Incluye derechos de autor, patentes o marcas. Los herederos pueden:
- Cobrar regalías.
- Explotar obras o inventos.
- Licenciar derechos.
Estos derechos tienen un plazo de vigencia legal que varía según el tipo de propiedad intelectual.
6. Patrimonio digital
Cada vez más relevante en herencias modernas:
- Cuentas en redes sociales.
- Correo electrónico y almacenamiento en la nube.
- Criptomonedas y monederos digitales.
- Páginas web y dominios.
En muchos casos, es necesario tener acceso a contraseñas o incluir en el testamento instrucciones para su gestión.
7. Derechos y obligaciones
No solo se heredan bienes; también se transmiten:
- Derechos de uso o usufructo.
- Créditos a favor del fallecido.
- Deudas y cargas (hipotecas, préstamos, facturas pendientes).
Si las deudas superan el valor de los bienes, los herederos pueden aceptar la herencia a beneficio de inventario o rechazarla.
Consejos para gestionar todos los bienes
- Hacer un inventario completo: no dejar fuera bienes menores o digitales.
- Valorar todos los activos: con tasadores oficiales si es necesario.
- Incluir instrucciones en el testamento: especialmente para bienes digitales o empresariales.
- Coordinarse con profesionales: notarios, abogados, gestores y peritos.
Conclusión
En una herencia entra mucho más que casas o cuentas bancarias. Desde joyas y participaciones sociales hasta activos digitales y derechos de autor, todo el patrimonio del fallecido forma parte de la masa hereditaria y debe repartirse conforme a la ley o al testamento.
Planificar su gestión evita conflictos y garantiza que cada bien se transmita sin problemas legales.